La puerta corredera cortafuegos está especialmente diseñada para cerrar y sectorizar grandes huecos en entornos industriales, logísticos y comerciales. Funciona eficientemente tanto en posición siempre abierta como en uso intensivo, y está disponible en versiones manual, semiautomática o automática.
Cuenta con certificación europea de prestaciones: 0370-CPR-4174.
Normativas aplicables:
La puerta corredera ofrece una resistencia al fuego de 120 minutos (EI2-120), garantizando la integridad estructural y el aislamiento frente a humo y gases desde ambos lados del cerramiento, incluso con herrajes expuestos al fuego.
Diseñada para cubrir huecos de gran formato sin renunciar a la seguridad ni la funcionalidad.
Para una instalación óptima, es necesario disponer de:
Estas medidas corresponden a una configuración estándar. Para otros montajes, consultar.
Cuando se activa la señal de alarma (mediante electroimán de 24VCC) o el fusible térmico alcanza los 68 °C, la puerta se libera automáticamente y es desplazada por su contrapeso hasta quedar completamente cerrada.
Un sistema eficaz que actúa sin intervención manual, incluso en situaciones críticas.
Todas las versiones cumplen con la normativa europea de protección contra incendios.
